Ponele que internan a tu abuela que tanto adorás, y se muere una amiga, y venías procrastinando heavy metal y llegan los parciales, y llegan todos juntos, y no leíste nada. Ponele que intentás encerrarte en tu casa y te viene y estás triste y el cielo gris. Inventás una mezcla de té en el pequeño recreito que te permitís a la lectura de kilos y kilos de fotocopias. Entonces ves que el celular ya casi no tiene batería y lo vas a cargar. Enchufas primero el cargador. Después, acercás lo que tenés en la mano. Pero el encuentro de ambas cosas se revela imposible: la taza de té no tiene puerto usb.
Estoy quemada.
3 comentarios:
bleh, que bajon. siempre igual, cuando pasa pasa todo junto. despues te llama susana y te ganas un auto, vos tranqui, es asi, equilibrio, karma, esas cosas raras.
aNto
uuffff tranki!!! como dice blanca t.p tarde o temprano las cosas encuentran el equilibrio , uno tiene que saber esperar ( te lo dice miss ansiosa-.-)
saludos!
¡Qué auto ni auto! Mínimo, el millón me deben el karma y la Su!!
se agradece el blogger support!
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